AMLO retirará de las calles al Ejército en seis meses, si llega a la Presidencia

Promete una “República amorosa”, con renovación moral, y hacer lo que Rossevelt: crear 4 millones de empleos en seis semanas. Propone que los líderes de PRD, PT y MC se postulen con él, para tener espacios en la precampaña

Dueto

CIUDAD DE MÉXICO, 16 de noviembre.- Andrés Manuel López Obrador aseguró que, de llegar a la Presidencia, en seis meses los militares regresarían a los cuarteles, al tiempo que se profesionalice a la Policía, porque “al Ejército lo están exponiendo”.

Prometió que si llega a ocupar el cargo, hará lo que Roosevelt: crear 4 millones de empleos en seis semanas.

En el tema de su posible candidatura, propuso que los dirigentes de PRD, PT y Movimiento Ciudadano se inscriban como precandidatos presidenciales para salvar una regla electoral que le impediría tener presencia en medios electrónicos en caso de ser aspirante único de la izquierda a la Presidencia.

Ayer, después que se dio a conocer que Marcelo Ebrard descartó contender y que López Obrador sería el candidato único de las izquierdas, los consejeros electorales Marco Baños y Alfredo Figueroa recordaron a Andrés Manuel López Obrador que las precampañas inician el 18 de diciembre.

Ambos recordaron que existe un artículo en la ley que prohíbe a los partidos políticos difundir la imagen de un precandidato único en radio y televisión durante los tiempos de precampaña, por lo que de ser López Obrador el único contendiente no podrá aparecer en los medios en el lapso de precampañas.

Tras criticar la ley electoral, el aspirante presidencial juzgó “muy injusta” dicha regla, porque le impediría el acceso a los medios electrónicos durante el periodo de precampaña, que se iniciará el 18 de diciembre y concluye el 18 de febrero.

En una amplia entrevista de radio, López Obrador habló de varios temas, entre ellos de su propuesta para crear una “República amorosa”, en la que se privilegie la honestidad y la justicia.

Sostuvo que el escenario de violencia que se vive en México es producto de “20 años de la aplicación de un modelo económico que no da alternativas a la gente”, y que sólo es posible erradicar esa violencia atendiendo las causas que la generan a través de un cambio “de fondo para sacar al pueblo adelante”.

“Se están cayendo a pedazos las cosas… se requiere una renovación tajante”, expuso el tabasqueño, y luego aseguró que, si llega a ser presidente, en seis meses habría un cambio, “una atmósfera de honestidad, de valores y un nuevo aliento” en el país.

Consideró que no basta el progreso material, sino que se requiere un código moral. “Si no fortalecemos valores no vamos a detener la degradación” en el país, sostuvo, porque “sólo siendo buenos podemos ser felices”.

Interrogado sobre el cambio en el tono de su discurso, al pasar de la “mafia en el poder” a la regeneración moral, el político sostuvo que no hay incongruencia de su parte y que sólo hace lo que de manera responsable es mejor para el país y para el movimiento que encabeza.

A pregunta expresa sobre si su intención es ser el “Lula” mexicano, respondió que “sí, cada quien con sus características”.

Insistió en que el principal problema de México es la deshonestidad, que lleva a una situación de desigualdad.

Consideró que el actual modelo neoliberal, “con honestidad (de los gobernantes) podría funcionar mejor”