Francisco Rodríguez
June 13, 2011
Pese a la última gran reforma de que fue objeto –y que tanto cacarea aún el ocupante de Los Pinos– el ISSSTE está en quiebra. En cambio, quienes lo han dirigido (sic) en los últimos años son supermillonarios. En pocos meses al frente de la Institución, Jesús Villalobos López da muestras de que la “protección” de Miguel Ángel Yunes y de su tío Miguel Ángel Córdoba Villalobos ante Felipe Calderón da resultados.
Formado bajo el amparo de Cecilia Barra y Gómez Ortigoza, Jesús Villalobos inicia su truculenta actuación en el sector público ocupando un puesto relevante en la SHCP como director general adjunto de Programación y Presupuesto “A” el 1 de agosto de 2002. La titular era la propia Barra.
Como buen cuatrero de las finanzas públicas que desde entonces ya era, Villalobos comenzó a hacer ahí de las suyas, según denuncian quienes entonces fueran sus compañeros en la dependencia: desvío de recursos y tráfico de influencias, por citar algunos, lo que provocó que en 2004 la directora Jurídica de la Subsecretaría de Egresos, Lilia Cortez García presentara a Cecilia Barra sendos informes que documentaban las irregularidades perpetradas por Villalobos.
Como resultado de ello, por su atrevimiento, Cortez García fue fulminantemente cesada y amenazada. No se quedó cruzada de brazos y presentó demandas ante la PGR contra Villalobos y su protectora por robo, amenazas, abuso de autoridad, usurpación de funciones, ejercicio indebido del servicio público y desvío de recursos, recurriendo también ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Las denuncias no prosperaron, pero de todos modos Villalobos llegó a la Procuraduría. Porque el 11 de mayo de 2005, por recomendación del titular de Hacienda Francisco Gil Díaz, el procurador Daniel Francisco Cabeza de Vaca designó a Cecilia Barra como oficial mayor de esa dependencia. Y en consecuencia, el 16 de mayo de ese año Villalobos fue designado director general de Recursos Financieros en la PGR. Desde ahí, de inmediato se dio a la tarea de crear un grupo de empresas denominadas “consultorías de inversiones”, cuyo objeto era fondear para así transparentar y blanquear los cuantiosos desvíos de recursos realizados en la PGR. ¡Hasta un Ferrari rojo llegó a estacionar en las instalaciones de la dependencia!
Dicen que por tal fue que en diciembre de 2005 Villalobos fue cesado fulminantemente por el procurador Cabeza de Vaca, aunque formalmente las causas fueron que se ostentaba y firmaba como licenciado en Economía sin tener concluidos los estudios académicos, además de haber sido pillado favoreciendo a una empresa para la asignación multimillonaria de un contrato de seguros.
No fue a la cárcel –“tapaos los unos a los otros” es la consigna– ni tampoco quedó mucho tiempo desempleado. Apenas poco más de un año, pues el 16 de febrero de 2006 Villalobos fue invitado por Miguel Ángel Yunes a tranzar como director general de Administración del Sistema Nacional de Seguridad Pública del que el veracruzano ahora panista era titular. Con su background y expertise, Villalobos seduce a Yunes, al presentarle el diseño para el desvío y lavado de recursos públicos a través de sus “consultorías de inversiones”… lo cual lo lleva al ISSSTE, donde fue nombrado por el propio Yunes como subdirector general de finanzas, el 1° de enero de 2007. Un mes después de iniciado el fatídico y fallido calderonato.
En el 2007, mediante la emisión del acuerdo 37.1307-2007 de la Junta Directiva y a propuesta de Yunes, se modifica la norma del ISSSTE para que las ausencias del director general fueran suplidas por el subdirector General de Finanzas. Todo perfectamente calculado. Porque durante los cinco años de gestión de la dupla Yunes-Villalobos se ha cometido un quebranto al Instituto que, fácil, alcanza ya los 40 mil millones de pesos. Baste con citar los hasta ahora conocidos:
1) Festejos del Bicentenario, durante 2008 y 2009, por un total de 2 mil 900 millones de pesos. 2) Contrato de voz y datos asignado a Bestel (filial de Televisa) en el año 2010, por 2 mil 080 millones de pesos. 3) Remodelación de hospitales, en este 2011, por 8 mil millones de pesos
Pero hay más. Tengo en mi poder copia de las declaraciones de situación patrimonial presentadas por Villalobos López ante la Función Pública desde 2002 y hasta 2011. Entre muchas inconsistencias detectadas, dos llaman la atención: en las declaraciones presentadas durante 2002, 2003, 2004, 2005, 2006 y 2007, en el apartado de escolaridad, Villalobos asienta haber cursado en la Universidad Anáhuac hasta el sexto semestre de la licenciatura en Economía, con status “trunca”. Sin embargo, durante esos años se ostentó y firmó como licenciado, violando lo que establece el artículo 3° constitucional en materia de profesiones e incurriendo en flagrante usurpación.
Es hasta 2008 cuando sospechosamente declara haber concluido la licenciatura en Administración de Empresas en la Ceneval.
Villalobos López también violó los artículos 47 y 81 de la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos pues presentó fuera de plazo (30 días naturales) su declaración de conclusión de encargo en Hacienda, que fue el 31 de diciembre de 2006 y la presentó hasta el 27 de febrero de 2007.
En 2009 presentó su declaración de modificación patrimonial el 30 de junio. La fecha límite era el 31 de mayo. Sin embargo, y a pesar de las fechorías cometidas, Villalobos no será tocado ni con el pétalo de un citatorio judicial. ¿El porqué? El secretario de la Función Pública Salvador Vega Casillas se lo confió al comisario encargado de auditar al ISSSTE: “tengo instrucciones precisas de Los Pinos de cuidar y exonerarlo de cualquier responsabilidad”, habría dicho el michoacano primo, a su vez, de Felipe Calderón.
¿Por qué? Porque “El Turco”, como conocen a Yunes en Los Pinos, está colaborando en la guerra contra el narcotráfico, dando información para la detención de grupos criminales contrarios a él. Y desde su bunker en Huixquilucan está obteniendo información para desbarrancar a Enrique Peña Nieto, explica Vega Casillas.
El ISSSTE, mientras tanto está quebrado. Sin recursos para jubilados. Sin medicinas ni…
Índice Flamígero: A 16 de meses de que “El Turco” dejara el ISSSTE, su esposa Leticia Márquez de Yunes sigue controlando los recursos de la Asociación Nacional de Servicios Voluntarios (ANASVO) por conducto de su prima Mirna Zamudio Estudillo. Otro caso de nepotismo que tampoco será investigado por órdenes del señor Calderón. + + + Haciendo uso de su derecho de réplica, LV solicitó publicar –con respecto a lo que leyó usted aquí el 3 de junio– “…que nunca he sido víctima de ningún tipo de agresión por parte del señor Arturo Soto, por ello tengo el compromiso moral y personal de asegurar enfáticamente que el presunto caso de intento de abuso sexual en la Unidad de Comunicación Social de la Sedesol nunca existió y que es un invento del informante anónimo que le proporcionó esos datos y lamento que no tenga el valor de mostrar su identidad, por lo que seguramente se trata de un cobarde que no sólo lo engañó a usted, sino que puso en riesgo la honorabilidad, el prestigio, la vida familiar y personal de las personas citadas en la nota referida. Por lo anterior, es mi deber, también, reconocer a Arturo Soto como un excelente compañero de trabajo que siempre me ha demostrado su respeto y amabilidad, por lo que resulta inverosímil la versión de una presunta agresión de él en contra de mi persona. Por tanto, es falso también que el Secretario de Desarrollo Social y sus más cercanos colaboradores estén involucrados en una situación inexistente. Repito que haciendo uso de mi derecho de réplica, solicito que a efecto de desmentir tajantemente a su informante tenga la amabilidad de publicar estas líneas en el mismo espacio que se le dedicó a la información que usted presumió como un hecho verídico y que yo le aseguro es completamente falsa…” Servida, LV.
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