Un juez falló a favor de una comunidad de Ecuador que demandó a la petrolera por contaminar la región que habitan y deteriorar su salud
Los habitantes del Amazonas aseguran que el monto de indemnización no es suficiente (AFP).
(CNN) — Un juez en Ecuador ordenó esta semana a la empresa Chevron el pago de 8,640 millones de dólares a los ciudadanos ecuatorianos residentes del Amazonas, por haber sido afectadosos durante años por el petróleo crudo que la empresa produce, sin embargo, ambas partes afirmaron que apelarán el veredicto.
La empresa petrolera Chevron arremetió contra el veredicto afirmando que fue "producto de un fraude", mientras que los demandantes consideran que el monto es insuficiente realizar una verdadera limpieza.
Luis Yanza, miembro de la Asamblea de los Afectados por Chevron, afirmó en conferencia de prensa que el veredicto era una victoria histórica y colectiva. Sin embargo, comentó que "8,000 millones de dólares no representan una cantidad significativa para reparar los daños ambientales".
El fallo contra la Chevron es el más reciente en los últimos 18 años de litigio entre los residentes del Amazonas y Texaco, empresa que posteriormente fue adquirida por Chevron. El juez Nicolás Zambrano tomó la decisión en un juzgado del Amazonas.
Por su parte, Chevron afirmó que también apelará.
"El fallo de la corte ecuatoriana es ilegítima e inaplicable", afirmó Chevron en un comunicado emitido el pasado lunes. "Es producto de un fraude y va en contra de evidencia científica legítima".
Ambas partes tienen hasta el viernes para presentar su apelación.
Más allá de que la apelación está aún pendiente, uno de los líderes locales, Humberto Piaguaje, describió el fallo como una victoria para la población que vive en el área de producción de petróleo ubicada en la parte norte de Ecuador.
"El juez ha hecho justicia y ha visto la realidad", comentó. "Sabemos que esta es sólo una parte de nuestra lucha, no nos detendremos hasta que se haga justicia y el daño se repare. El mundo debe saber lo que ocurrió en el Amazonas y de nuestra lucha por la vida y la justicia".
El caso, conocido como Aguinda contra Chevron Texaco, se presentó originalmente en 1993 en Nueva York en representación de 30,000 habitantes de la región Amazónica del Ecuador. La demanda eventualmente se transfirió a la corte y jurisdicción ecuatoriana.
Según un documento facilitado por la Coalición por la Defensa del Amazonas, la demanda establece que Texaco utilizó en Ecuador una serie de prácticas de producción por debajo de los estándares aceptados, lo cual se tradujo en contaminación que a la postre afectaría a varios grupos indígenas del área.
El grupo asegura que Chevron ha admitido que Texaco desechó más de 18,000 millones de galones de materiales tóxicos en las vías fluviales del Amazonas, abandonó más de 900 fosas de deshechos, quemó millones de metros cúbicos de gases sin ningún tipo de control y derramó más de 17 millones de galones de petróleo producto de fisuras en sus oleoductos.
Asimismo, afirman que el cáncer y otro tipo de enfermedades se han incrementado en el área.
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