sábado, 23 de octubre de 2010

Friedrich Katz, historiador de México* (1927-2010)


Enrique Florescano

La Jornada

Friedrich Katz visitó por primera vez México en 1940, cuando tenía 13 años, expulsado por las persecuciones nazis que afectaron y dispersaron a su familia. Regresó en 1948 y estudió en la Escuela Nacional de Antropología e Historia.

Estos contactos iniciales marcaron el resto de su vida. Su tesis doctoral fue un estudio sobre la situación social y económica de los aztecas que concluía con un capítulo dedicado a comparar la sociedad azteca con el reino de los Incas en Perú.1

Los años de 1940 a 1960 fueron decisivos en su formación. En ese tiempo vivió la Segunda Guerra Mundial, saltó de un país a otro, aprendió varios idiomas, conoció los últimos años del gobierno de Lázaro Cárdenas, y tuvo un primer contacto con los archivos vinculados al tema que desde entonces absorbió su atención: las grandes transformaciones sociales, económicas y políticas que cambiaron la historia mexicana.

Su interés por la historia de México tomó un camino irrevocable en 1956, cuando inició en la Universidad Humboldt de Berlín una investigación sobre las relaciones entre Alemania y México durante el gobierno de Porfirio Díaz y el inicio de la revolución de 1910.

Mi primer contacto con Friedrich Katz fue como lector, recorriendo las páginas de su libro sobre la organización social y económica de los aztecas. Me impresionó entonces su ambición para enfrentarse a problemas históricos complejos, y su interés por comparar los procesos históricos mexicanos con fenómenos semejantes ocurridos en otros países.

Más tarde tuve la suerte de tratarlo personalmente. En las décadas de 1960 y 1970 se discutía mucho en México sobre las diversas interpretaciones de la historia y era frecuente que esas conversaciones terminaran con los participantes atrincherados en posiciones irreductibles y enemigas. Conversar con Friedrich Katz era otra ex-

periencia. Participaba en esos debates pero llamaba la atención verlo transformar el alegato en diálogo, o extraer aspectos positivos de posturas a primera vista irreconciliables.

Otra impresión grata fue ver esas cualidades transportadas al libro que tituló La guerra secreta en México.2 Los conflictos diplomáticos que suscitó la Revolución mexicana habían sido objeto de numerosos estudios, pero hubo que esperar la aparición de esta obra para develar el tejido de intereses políticos, económicos y diplomáticos internacionales que confluyeron en el escenario de la Revolución mexicana, un escenario suficientemente convulsionado como para que en él se pusieran a prueba las más diversas estrategias ideadas por las grandes potencias para definir su hegemonía en el escenario mundial.

El libro de Katz se funda en una impresionante documentación colectada en archivos de México, Estados Unidos, Alemania, Francia, Inglaterra, Cuba y España, recorre los conflictos internacionales que agobiaron a los gobiernos de Porfirio Díaz, Madero, Huerta y Carranza, y explica de manera brillante las múltiples presiones desencadenadas por las grandes potencias para imponer sus intereses en México, o para mover ahí una pieza importante conectada con el más complicado tablero internacional en el que se jugaban las partidas decisivas que culminaron en la Primera Guerra Mundial. La guerra secreta expone magistralmente la intervención de las intrigas políticas y diplomáticas en la configuración de la Revolución mexicana, y arroja luz sobre las pugnas que opusieron a las grandes potencias en los años que precedieron a la Primera Guerra Mundial.

Añade otras cualidades que la convirtieron en obra indispensable para conocer los mecanismos que modelaron el transcurso de la Revolución mexicana. Una de ellas es la descripción precisa de los hechos particulares y su vinculación con los procesos económicos, políticos o sociales mayores, de tal manera que unos y otros aparecen con su fisonomía propia y mutuamente se distinguen y explican. Mediante el análisis virtuoso de lo particular con los marcos más amplios que lo contienen, Katz pone en relación procesos históricos que la historiografía académica con frecuencia registra distanciados uno del otro.

En La guerra secreta Friedrich Katz se impuso la exigencia de explicar procesos considerables, como los imperialismos, los mecanismos de la guerra y las reacciones nacionales ante las presiones externas. En esa dilatada indagación descubrió datos extraídos de archivos inexplorados que enriquecieron el conocimiento anterior. Al unir estas variadas operaciones y conjugarlas en una exposición elegante, su libro nos transmite la sensación del cambio en la historia, muestra la transformación que operan las fuerzas de la historia en un escenario geográfico y humano específico.

Pancho Villa, el libro que culmina su larga indagación sobre la revolución mexicana, es, como se dice en francés, un tour de force, una hazaña intelectual.3 Como lo indica su título, se trata de un estudio concentrado en la vida y las acciones de este personaje legendario. Pero es mucho más que una biografía.

El talento del historiador convirtió el trazo biográfico en un gran lienzo que capturó los rasgos esenciales de un proceso que abarca el fin de un régimen, el origen de un movimiento revolucionario en el extremo norte del país, la inusitada transformación de un prófugo de la ley en jefe de ejércitos poderosos y en figura política nacional, la cruenta lucha por el poder entre los bandos surgidos de la revolución y el significado de estos episodios extraordinarios en el movimiento general que llamamos revolución mexicana.

Pancho Villa acumula en sus páginas muchas de las virtudes que admiramos en el oficio de historiador. Pero uno de sus rasgos más notables es su maestría para acercarnos a esa multitud de actores que se dan cita en los escenarios más diversos y contrastados, y motivados por impulsos internos o colectivos, o empujados por circunstancias inescapables, van construyendo el confuso y precipitado momento revolucionario.

Katz recoge los innumerables testimonios sobre Villa, así los mitos como los datos duros. Aplica ese procedimiento escrupuloso a los grandes personajes y a los actores de las clases medias y populares, y lo mantiene en la recreación de las batallas o en el balance de las administraciones revolucionarias. Y es aquí, en la acumulación exhaustiva de los datos, en el fino tratamiento individualizado de cada uno de ellos, en el análisis meticuloso de las distintas versiones de los hechos, y en la equilibrada reconstrucción de los acontecimientos, donde brilla el talento del historiador.

Una de las primeras reacciones del lector de Pancho Villa es la de agradecimiento por la inconmensurable cantidad de datos que se le ofrecen, y por la presentación elegante y razonada que de ellos hace el autor. Friedrich Katz procede con honradez y gentileza frente al lector, pero no evade proponer su propia interpretación de los personajes y los acontecimientos. Y aquí también brinda otra lección, porque su escritura se convierte en una exposición clara y persuasiva. La suma de esas virtudes convirtió a Pancho Villa en una obra magistral, en un venero de enseñanzas para el historiador.

Quiero expresar mi agradecimiento a los promotores de este homenaje porque me brindaron la ocasión de leer por segunda vez este libro aleccionador, y porque me han dado la alegría de rendir mi homenaje personal al historiador Friedrich Katz.

* Este breve ensayo que escribí en el año 2007 será incluido en el libro de Homenaje a Friedrich Katz próximo a publicar por El Colegio de México.

1Esta tesis se publicó en México con el título de Situación social y económica de los aztecas durante los siglos XV y XVI. Universidad Nacional Autónoma de México, 1966.

2 La primera versión de esta obra fue la tesis Deutschland, Diaz and die Mexikanische Revolution. Berlin, 1964. Más tarde enriqueció esta investigación y la publicó bajo el título de The Secret War in Mexico. Europe, the United States and the Mexican Revolution. The University of Chicago Press, 1981. Un año después la editorial Era la publicó en español: La guerra secreta en México. Europa, Estados Unidos y la revolución mexicana. 2 volúmenes.

3 La primera edición de esta obra se hizo en inglés, The Life and Times of Pancho Villa. La Editorial Era la publicó con el título de Pancho Villa. 1998, 2 tomos.

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