Ahora, en el conclave que representa el 2010 en materia de elecciones locales y ante la desesperación por lograr acceder a gobiernos locales, el PRD es capaz de cualquier cosa, incluso de postular al gobierno de Tamaulipas a quien fue la cabeza de las operaciones financieras realizadas fuera de la ley para llevar a Vicente Fox a la presidencia; se olvidaron de las irregularidades cometidas y buscan al cerebro financiero del presidente del cambio.
Hace 12 años, Lino Korrodi fue el fundador de la asociación civil “Amigos de Vicente Fox”. También, en ese mismo año, fundó el Fideicomiso para el Desarrollo y la Democracia en México, el objetivo de ambas instituciones era, como es de todos conocido, llevar a Vicente Fox a la presidencia de México. Korrodi cumplió con su encargo: obtener recursos para ganar la presidencia.
Para lograr su cometido, Korrodi se auxilió de tres empresas de su propiedad. Gracias a la triangulación de recursos de Grupo Alta Tecnología en Impresos, ST & K y K-Beta con “Amigos de Fox” y el Fideicomiso las operaciones financieras a favor del candidato Fox fueron encubiertas y no reportadas a la autoridad electoral. Con los recursos obtenidos realizó un financiamiento paralelo de la campaña y, en consecuencia, además de ganar la elección la coalición que postuló a Fox rebasó el tope de gastos de campaña.
Ahora, el PRD olvida las truculentas operaciones realizadas por el empresario y pretende lanzar a Korrodi a la gubernatura de Tamaulipas como candidato ciudadano. Enemistado con Fox y repudiado por el PAN, Lino Korrodi ve posibilidades de triunfo. El presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, Jesús Ortega, confirmó la existencia de un acercamiento con el empresario y las ventajas de las candidaturas ciudadanas. Sin embargo, a nivel local el PRD se opone a la precandidatura. Por su parte, el líder del PAN, César Nava canceló la posibilidad de lograr alianzas con Korrodi como candidato.
En las elecciones de este año en Tamaulipas están en juego la gubernatura, la totalidad del congreso (32 curules) y 43 alcaldías. Violencia, inseguridad y narcotráfico son algunos de los problemas que el próximo gobernador de Tamaulipas deberá enfrentar.
Con un tope de gastos de precamapaña de $18,511,055.03, Korrodi deberá afrontar una elección interna en un PRD dividido. En caso de resultar candidato a la gubernatura, lo máximo que podrá gastar en el marco de la ley es $71,969,187.39.
En Tamaulipas gobierna el PRI, el actual gobernador Eugenio Hernández Flores logró obtener en las elecciones federales del pasado 5 de julio los 8 distritos de mayoría relativa, y los votos a favor de los candidatos del PRD sólo llegan al 4%. Con este panorama se ve difícil que Korrodi logre llegar a gobernar Tamaulipas.
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