viernes, 10 de junio de 2011

Estampas de la Caravana del Consuelo

Espacio Civil

"Por favor... ayúdenme a encontrar a mi hijo... por piedad... ayúdenme a encontrarlo... yo me pregunto: ¿dónde están las autoridades?, ¿quién nos protege?... ya no aguanto este dolor". Estas palabras fueron parte del desgarrador testimonio de la madre de un hijo desaparecido hace casi dos meses en Nuevo León. Como ella, docenas de otras víctimas de la delincuencia y de la desatención, ineficacia y, en casos, hasta de la indolencia de las autoridades han hablado en los eventos públicos que se han organizado para recibir a la Caravana por la Paz con Justicia y Dignidad. Escenas como éstas se repiten a lo largo de todo el recorrido desde Cuernavaca hasta Ciudad Juárez. Aquí, algunas estampas de lo que he podido escuchar.

En Morelia, un líder indígena de la comunidad de Cherán, Michoacán, explica que su comunidad, que se organizó para defenderse de los talamontes y delincuentes que asolaban la zona, se encuentra en grave situación de desabasto y de falta de apoyos cuando ya van casi dos meses que han tenido que recurrir a esta medida de emergencia ante la desprotección de las autoridades.

En una comunidad antes de llegar a Durango, un niño de aproximadamente seis años de edad se aproxima portando el retrato de su padre y al querer hablar rompe en llanto sin poder explicar nada. Su familiar explica que su padre desapareció (lo secuestraron) hace meses y no se sabe nada de él.

En Durango, la esposa de un policía estatal desaparecido habla de la situación de abandono en la que se encuentra y de la falta de apoyo de las autoridades estatales y de la falta de recursos para alimentar, educar y cuidar a sus cuatro hijos.

Durante la recepción en Saltillo, el obispo don Raúl Vera nos informa que justo ese día fueron asesinados 11 jóvenes en un centro de atención a drogadictos en Torreón; los dos sobrevivientes que quedaron gravemente heridos fueron rematados el día siguiente en el hospital, hasta donde llegaron los asesinos y salieron sin que nadie los detuviera, como ha pasado ya en otras ocasiones.

Familiares de nueve personas desaparecidas presentan en reunión con el procurador de Nuevo León información de su caso. En los nueve se presentaron denuncias y en los nueve no hay culpables aún. Algunas de ellas tienen más de cuatro años de presentadas. En los casos hay servidores públicos que han desaparecido.

En Chihuahua se coloca la placa con el nombre de Marisela Escobedo, quien fue asesinada fuera del palacio de gobierno por exigir justicia ante el asesinato de su hija Rubí. Ella y muchas otras representan ya la segunda generación del feminicidio. Su nombre, su lucha, su exigencia no pueden ser olvidados. Este acto simbólico es para ponerle nombre a todas las víctimas de esta espantosa realidad que unos llaman guerra y otros lucha por la seguridad.

Hoy se reúnen en Ciudad Juárez cientos de personas para llevar a cabo un gran encuentro entre ciudadanos, para lanzar al país el Pacto por la Paz con Justicia y Dignidad. Esta iniciativa abre un esperanzador horizonte, desde la paz y la no violencia, por la transformación de México.

Mañana, en El Paso, Texas, Estados Unidos, representantes de la Caravana se reunirán con mexicanos, víctimas de la violencia que han huido de su patria buscando protección y asilo. También habrá una manifestación para demandar a las autoridades y sociedad de ese país su corresponsabilidad en la construcción de la paz en México. La fórmula perversa de que allá se ponen los dólares y acá la sangre es parte fundamental del problema.

Algunos de los testimonios me han hecho llorar como nunca en mi vida, y, por lo que vi, también a activistas, periodistas, camarógrafos, reporteros, prácticamente a todos los y las que vamos en la caravana. Esta iniciativa ha permitido que muchas víctimas se hayan atrevido a hablar, a romper el miedo y el silencio. En verdad, la caravana se ha convertido en la "Caravana del Consuelo". Muchas organizaciones y personas se han encontrado para levantar su voz y juntar sus corazones por la paz. En varias ciudades comentan que no se había dado una cosa semejante.

Las dudas y preguntas de qué sigue salen una y otra vez. Parte de lo que se espera que pase hoy en "Juaritos" podrá ayudar a responder de mejor manera. Además de un plan de acción, esperamos que se integren las Comisiones Ciudadanas que le darán seguimiento al Pacto y verificarán el cumplimiento y avance de los puntos ahí contemplados. También es muy probable que se generen las condiciones para iniciar un proceso dialogal con los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial. De hecho, de los dos primeros se han recibido claras señales para que así suceda. También se han recibido señales de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), en particular de quienes gobiernan Oaxaca, Distrito Federal y Michoacán, así como del Congreso de Oaxaca.

Esta movilización puede pasar a ser un movimiento ciudadano. Su aporte puede ser no sólo de una gran utilidad, sino de un gran sentido esperanzador y transformador. Está abriendo novedosas e innovadoras pistas para la participación ciudadana, sobre todo para los jóvenes. Múltiples riesgos acechan, pero vale mucho la pena el esfuerzo. En mi caso, los más de 3,000 kilómetros recorridos (y los que faltan) son una de las experiencias más esperanzadoras de mi vida; mi familia, mi gente, mi país, mi planeta bien los han valido.

*Defensor de los derechos humanos

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