Armas ilegales más poderosas en México vienen de CA: EU

De acuerdo a Wikileaks, el gobierno de EU responsabiliza al mexicano y a sus débiles controles de la frontera sur

MÉXICO, 29 de marzo, 2011.- Las armas más letales y poderosas compradas ilegalmente por el crimen organizado en México entran al país por la frontera sur y no por el norte, según funcionarios del gobierno de Estados Unidos.

Lo anterior es una filtración más de Wikileaks en la cual se pone de manifiesto un punto de percepción de los estadounidenses en torno a la frontera entre México y Centroamérica: los cruces están mal protegidos y pero vigilados por las autoridades mexicanas locales y federales.

De este modo, los cables enviados por la embajada de México al Departamento de Estado entre marzo de 2009 y enero de 2010 –dados a conocer hoy- consignan el descontento del país del norte por la internación de arsenal peligroso a México desde el sur.

Y es que, según la apreciación de los diplomáticos estadounidenses, los dirigentes políticos mexicanos no se inhiben a la hora de recordarles que la demanda de drogas en Estados Unidos, el lavado de dinero y el flujo de armas ilegales desde aquel lado de la frontera sirve de combustible a la guerra del narco en México.

Sin embargo, agregan, México no se da cuenta de que el equipo –incluso de tipo militar de grueso calibre- entra también por la frontera sur que ha sido descuidada gravemente.

En el cable informativo 09MEXICO880 elaborado como contexto para los funcionarios de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) -y expuesto hoy por La Jornada- se menciona una tendencia que era apenas detectada en ese periodo (2008-2009, cuando se aceleró en forma exponencial la violencia en el país ligada al crimen organizado): las organizaciones de narcotraficantes demandaban cada vez más poder de fuego y compraban ya no el armamento tradicional, sino sobre todo equipo tipo militar, incluidas granadas, armas antitanque ligeras y rifles de gruesos calibres no convencionales.

Este despacho asegura que del armamento de este tipo confiscado por las policías mexicanas y rastreado por autoridades estadounidenses, 90% no proviene, como las armas más tradicionales, de Estados Unidos, sino de los arsenales de los ejércitos de Centroamérica.

Otro cable posterior (10MEXICO77) –refiere la Jornada- reseña la conferencia bilateral sobre tráfico de armas de octubre de 2009, en Tapachula, donde se responsabiliza al gobierno mexicano y a sus débiles controles de la frontera sur por los problemas crecientes con el contrabando de armas y la migración ilegal procedentes de Centroamérica.

“Por lo visto y oído en ese acto, el entonces ministro consejero John Feeley, que hoy actúa como representante interino en la embajada, destacó la dramática evidencia de las carencias que tiene la frontera sur mexicana. Entre otros detalles, y sin considerar la asimetría existente entre las dos realidades, destaca la siguiente cifra: mientras la Patrulla Fronteriza estadunidense vigila con más de 30 mil elementos los 3 mil 926 kilómetros de la frontera México-Estados Unidos, sólo hay 125 funcionarios de Migración monitoreando los 929 kilómetros de la frontera México-Guatemala”. (El Semanario Agencia, ESA)