Redacción EjeCentral.com.mx
Los resultados de la última Encuesta Nacional Sobre la Inseguridad (ENSI-7), levantada por el INEGI, son incorrectos, criticó este jueves el Instituto Ciudadano de Estudios Sobre la Inseguridad (ICESI).
El ICESI había diseñado, coordinado y analizado esa encuesta desde el 2002, pero en la versión del 2009, dada a conocer hace unas semanas, ese derecho le fue retirado. Ahora, afirman que no pueden avalar los resultados gubernamentales.
Los números, en general, mostraron un aumento de la percepción de inseguridad en la mayoría de las entidades del país.
Para el ICESI, sin embargo, ese resultado se debe a distintos errores metodológicos del INEGI.
De entrada, la longitud del cuestionario se duplicó, lo que siempre crea desgano en la actitud de las personas que responden este tipo de ejercicios, detalla.
De 89 preguntas en la encuesta 2008, se pasó a 178. Además, 131 preguntan sobre la percepción de inseguridad al entrevistado.
A pesar de que la percepción de inseguridad aumentó, la misma encuesta revela que el número general de delitos bajó, tanto en porcentajes como en cifras absolutas.
Además, en sus reportes metodológico y operativo el INEGI no reparó en las áreas inseguras en las que fue imposible realizar la encuesta.
De las 3,500 viviendas seleccionadas en Tamaulipas para realizar la ENSI-7, en 1,174 hubo no respuesta, que equivale al 33.5 %. No se pudieron aplicar 659 cuestionarios (18.8 % del total de la muestra) por inseguridad del área, por la negativa de los moradores o por tratarse de viviendas deshabitadas.
Además, en Tamaulipas la ENSI-7 muestra un drástico descenso en la criminalidad absolutamente atípico. En el 2007, la incidencia delictiva en ese estado fue de 13 mil 760 por cada 100 mil habitantes. Pero en el 2009, la cifra cayó a 5 mil 434.
Otro caso. De las 4,873 viviendas seleccionadas en Chihuahua para realizar la ENSI-7, en 1,271 hubo no respuesta, que equivale al 26 %.No se pudieron aplicar 787 cuestionarios (16.1 % del total de la muestra) por inseguridad del área, por la negativa de los moradores o por tratarse de viviendas deshabitadas.
Los datos publicados por el INEGI, señala el ICESI, omiten uno de los datos más relevantes de la encuesta, precisamente el que permite conocer el tamaño de la impunidad: el porcentaje de presuntos delincuentes puestos a disposición de un juez.
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