OSLO, 14 de septiembre, 2010.- La recesión económica que inició en 2007 trajo consigo un fuerte impacto en el desempleo, en México, 900,000 personas sufrieron de estos efectos, según informaron el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Durante una conferencia en Oslo, Noruega, ambas organizaciones internacionales advirtieron que "una recuperación que no genere empleo no es recuperación", por eso, los gobiernos nacionales deben planear bien sus estrategias y políticas para la reparación y el crecimiento.
Dominique Strauss-Kahn, director del FMI, mencionó en la Conferencia sobre Empleo que "la crisis financiera no sólo no ha terminado sino que ha generado una crisis de empleo".
Además calificó "catastrófica" la situación del mercado laboral mundial, pidió a los gobiernos "cautela" en la aplicación de sus políticas anticrisis de tal forma que consolidación fiscal y crecimiento aparezcan equilibrados.
La OIT estima que el desempleo en el mundo aumentó en más de 30,000,000 desde 2007. En las economías avanzadas el incremento del desempleo ha sido especialmente grave, pero la crisis ha afectado también los mercados emergentes y las economías en desarrollo, como la mexicana.
Los organismos subrayaron que México fue afectado, en parte, por su fuerte dependencia de la economía estadounidense y por la caída de remesas.
El informe The Challenges of Growth, Employment and Social Cohesion también detalla que México ha expandido recientemente su programa de empleos temporales en respuesta a la crisis. Destaca que cerca de 500,000 empleos de este tipo se crearon entre Enero y Julio de 2009. (El Semanario Agencia, ESA)
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