MÉXICO, 13 de septiembre, 2010.- “Estas cantidades de dinero van más allá de la justicia sindical y social, es respetable la lucha de los trabajadores, pero aquí es cuestión de cotos de poder y corrupción”, señaló José Fernández Santillán, politólogo del Instituto Tecnológico de Monterrey, en torno a las millonarias prestaciones que por contrato colectivo de trabajo fueron presentadas en el proyecto de presupuesto de gasto de la Secretaría de Educación Pública (SEP) para el 2011.
Luego de que El Semanario diera a conocer las elevadas prestaciones que se pretenden otorgar a trabajadores de esta dependencia en el presupuesto 2011,
y que de ser aprobado los salarios de albañiles, pintores, jardineros, dibujantes y edecanes, entre otros, superarían los 60,000 pesos mensuales, el catedrático indicó que este tipo de cuestiones nos hacen recordar lo necesarios que son los trabajos que realizan organismos de contraloría como la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
“Estamos de acuerdo en que los trabajadores busquen una vida digna, pero es necesario que estos casos sean revisados por las instancias jurídicas correspondientes para que no vuelvan a suceder, enoja mucho que nos quieran venir a tomar el pelo diciéndonos estan trabajando por el desarrollo”, dijo el especialista.
Santillán comentó que es necesario que se comience a trabajar de forma efectiva en la temática de la educación, además de que se invierta de forma correcta en los procedimientos que se dan en la misma y en el impulso a la tecnología.
“Países como España y Corea del Sur hicieron esto, hace unos años estaban a la par de nosotros y hoy nos superan hasta 3 o 4 veces en crecimiento científico y educativo”, agregó.
Recordó que si de verdad se busca mejorar la situación del país, se debe de trabajar por la educación, la cual es uno de los verdaderos detonadores del desarrollo y el cambio.
“La falta de mejoras educativas aunadas al tobogán degenerativo de corrupción y violencia muestran perfectamente la razón por la cual el país esta como esta”, mencionó.
Para el experto del ITESM, no es necesario que se rompa con el sindicalismo, sino que se evalúe correctamente qué clase de sindicalismo es el que tenemos y cuál es que verdaderamente debemos tener.
Fernández Santillán aseguró que este tipo de situaciones no sólo son observables en la SEP y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), sino que son una constante que se encuentra año con año en organismos como Petróleos Mexicanos (PEMEX). (El Semanario Agencia, ESA)
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