jueves, 24 de junio de 2010
Chiapas.- La organización civil Las Abejas, sobrevivientes y familiares de la masacre de Acteal, Chiapas, acusaron al presidente Felipe Calderón de causar una guerra contra el pueblo mexicano por su política de combate al narcotráfico, causando más impunidad, muertes y el olvido de los mártires.
Mes con mes, desde el 22 de diciembre de 1997, Las Abejas recuerdan a sus muertos, 45 hombres y mujeres que perdieron la vida acribillados por un grupo paramilitar por su simpatía hacia el Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
Ahora, señalan se suman también a quienes sufren la violenta pérdida de sus seres queridos que han caído bajo las balas de las autoridades o del crimen organizado.
“La noticia no es que hubo ejecutados, sino que se ha establecido récord en el número de muertos, en la crueldad de las ejecuciones o en las mentiras de las autoridades.
“Mientras el mal gobierno sigue diciendo a los ciegos que está ganando esta guerra, los muertos ya no tienen nombre, ni memoria; cada masacre del nuevo día borra las noticias del día anterior”, precisa el organismo en un comunicado.
“Si los muertos no se recuerdan, los caídos de ayer serán relegados por los muertos de hoy y así cada día, hasta que nos acostumbremos a la impunidad y al olvido”, señala.
Las Abejas exigieron un alto a los delitos contra la humanidad que se realizan en nombre de la guerra contra el narcotráfico, de la seguridad pública o nacional. “Esta guerra es contra el propio pueblo mexicano”, sentenciaron.
“La única manera de ganarle al crimen y a la corrupción es ya no poniendo la confianza en las armas, sino buscando las causas verdaderas de esos males”
El gobierno podría empezar por los “criminales” que organizaron la matanza de Acteal: Ernesto Zedillo, Emilio Chuayffet, generales Enrique Cervantes y Mario Renán Castillo, el ex gobernador Julio César Ruiz Ferro y los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que Liberaron a los “paramilitares”, puntualizaron Las Abejas.
Criticaron los programas sociales que tienen como objeto comprar las conciencias de los indígenas y personas marginadas, abusando de sus necesidades.
“El problema de México no es que no haya un pueblo conciente y organizado, el problema es que el mal gobierno quiere hacer las cosas no con el pueblo sino sin y hasta contra el pueblo. Así es en la lucha contra el narcotráfico y también en las propuestas de desarrollo”.
Fuente de información, Redacción EMET
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