lunes, 17 de mayo de 2010

Co-gobierno nacional con los capos


Luis González de Alba


17 mayo 2010

El titular interior de MILENIO me dejó pasmado y lo leí 6, 7 veces… “Piden PRI y PRD dejar de corretear a capos”. Es que ya no ven lo duro, sino lo tupido: cuando no les arrebatan una tonelada de cocaína, son diez de mota, el Ejército destruye un campamento de Zetas en Nuevo León y decomisa camionetas, lanzagranadas y… cohetes antiaéreos.

Solución muy mencionada: dar opciones sociales: fuentes de trabajo para los jóvenes (los que tengan para comprar su plaza pueden ingresar a Pemex, los que tengan tía anciana pueden heredar su plaza de maestra en el SNTE, y así). Veo a Román Revueltas, el flautista de Aguascalientes, dando conciertos por todo el país, seguido por un río de ratas con ametralladoras y pistolas recubiertas de oro y joyas. Yo le pediría que se dirigiera al cráter del Popo para que allí se arrojaran todos. No tengo esperanza de que trabajo honesto y sinfonías de Brahms acaben con los capos.

Los números lo confirman: En el primer trimestre, nuestras exportaciones se dispararon 35.7 por ciento, dice Reforma.

Según La Crónica del 14 de mayo, el cardenal Norberto Rivera no cree en las acciones del Ejército contra el narcotráfico. “Nuestra sociedad está ya harta de violencia y decimos que no basta la fuerza, que jamás la Policía o el Ejército van a poner paz. Tenemos toda la razón, la violencia siempre engendrará violencia”, dijo en la Universidad Anáhuac, perteneciente a los Legionarios de Cristo. Mejor defensa del crimen, imposible.

Crimen siempre habrá, en efecto. Pero la convicción de que los criminales eran imbatibles por su alto poder de fuego nos condujo a la situación actual, y nos encontramos ante hechos que rebasan nuestras fronteras: las armas vienen de EU, la droga va para allá, y el nudo de intereses y corrupciones cruza la frontera en ambos sentidos.

Lo que vimos en la mayor parte del país, fue el establecimiento de un co-gobierno con los capos del narco y del secuestro. Los joyeros están obligados a decorarles con diamantes sus armas o perder la vida al negarse, el PRD en Tamaulipas decidió no lanzar candidatos. El PAN sí lo hizo y ya tenemos la nota: su candidato a la alcaldía de Valle Hermoso, José Mario Guajardo Varela, fue ejecutado con su hijo y otra persona.

El meollo del asunto es la debilidad del Estado y su pérdida de territorios en la frontera norte y en otras regiones. La ley la dictan los narcos, las elecciones las dirimen ellos desde el sencillo expediente de amenazar a los candidatos indeseables. Y cumplir amenazas.

Ante esta realidad, cada vez se entiende menos el ¡Ya basta! que vemos de manera cotidiana en los medios: ¿Ya basta de qué? ¿Cuál es la opción? El poder corruptor del narco lo vimos en las manifestaciones “populares” de Monterrey contra la presencia del Ejército: jóvenes que admitieron la paga recibida por gritar en las calles una consigna políticamente correcta: El Ejército a sus cuarteles.

El poder de fuego del crimen lo muestra el ataque contra la titular de Seguridad Pública de Michoacán, Minerva Bautista. En la emboscada, los sicarios emplearon rifles AK-47, AR-15, granadas, armas antiaéreas y antiblindados.

La sociedad está penetrada en muchas regiones por el narco, desde curitas como aquel Montaño que negoció para los Arellano Félix con el nuncio Prigione una entrevista con el Presidente de la República, o los que toman la limosna y la bendicen, hasta los ciudadanos que agradecen la pavimentación de una calle o la restauración de una escuela. Los malos no siempre son malos ni con todos.

Del año 2000 al 2005, la Ciudad de México vio crecer el narcomenudeo hasta 730 por ciento sin que su gobierno tomara medida alguna. Diversos medios publicaron, una y otra vez, domicilios de estanquillos donde se vendía droga, pero nunca fueron molestados. Es prueba suficiente de que en el río revuelto del narcotráfico hay de todo, incluidas autoridades.

Concluyó sesiones el Congreso y nos dejó sin Ley de Seguridad Nacional, sin Ley Antisecuestros, sin Guardia Nacional que pueda sustituir con eficacia al Ejército, sin policías estatales al menos: nada. Ya están de vacaciones.

¿Cuál sería la meta de la campaña emprendida por el Presidente? No veo sino una: la recuperación por el Estado de los territorios perdidos y el regreso del crimen a la clandestinidad. Para eso, y para que el Ejército regrese a sus cuarteles, los legisladores deben ponerse a trabajar. Y, se me olvidó otra vez: es pedirles demasiado.

www.luisgonzalezdealba.com

3 comentarios:

Unknown dijo...

Necesitamos un partido digno de un estado capaz de luchar por todo. Por favor basta de estar votando por partidos que solo estan unidos a la maldad, partidos que nos estan llevando por mal camino. Apoyemos al PRI de ahora, un partido lleno de cambios y capaz de luchar por el bienestar de Mexico.

Unknown dijo...

Necesitamos un partido digno de un estado capaz de luchar por todo. Por favor basta de estar votando por partidos que solo estan unidos a la maldad, partidos que nos estan llevando por mal camino. Apoyemos al PRI de ahora, un partido lleno de cambios y capaz de luchar por el bienestar de Mexico.

Unknown dijo...

Vamos por un buen camino al querer cambiar, por eso apoyemos al PRi que en verdad es un partido de cambio, no como los otros que nada mas nos prometieron cosas buenas y lo único que nos hemos llevado es mas inseguridad e inestabilidad en el país.
Este 4 de Julio votemos por un buen partido y por un buen candidato RTC