martes, 23 de agosto de 2011

Morelianas priistas

Martha Anaya

August 23, 2011

Se lleva las palmas Humberto Moreira durante los coloquios priistas en Morelia, Michoacán.

El motivo del paseíllo de los tricolores por aquellas tierras era la plenaria de los senadores para armar su agenda del próximo periodo ordinario de sesiones, pero el líder nacional del PRI –ahí presente– no pudo evadir más a los reporteros y hubo de enfrentar las acusaciones sobre la deuda a la que llevó a su estado, Coahuila, durante su gobierno; y la falsificación de documentos en torno al tema.

Según Moreira, tales señalamientos (aumentar la deuda de 300 millones a 30 mil millones de pesos durante su sexenio) son “una campaña perversa” en su contra, emprendida por el PAN y el gobierno federal.

¿Qué dijo Moreira al respecto? Ahí le va:

“Yo no puedo entrar a una campaña así, como si no hubiera un Drácula que le chupa la sangre a los estados. Hay toda una campaña para tratar de lesionar al presidente del partido, me extraña que no se hable de la deuda del Gobierno federal que es de 5 billones de pesos. ¡Sacaron un bono para etiquetar al país durante los próximos 100 años!”.

No negó la existencia de la deuda. La justificó de esta manera: “Hay deudas de diversos tipos, como son de largo plazo, a mediano y corto”, sin entrar en detalles. Pero sí subrayó que Coahuila puede presumir que es la entidad que tiene menor deuda de pobreza.

Moreira advirtió que si seguían las acusaciones en su contra revelaría información sobre “otros temas”. ¿Cuáles? Apuntó uno: “como de la deuda de muertes”.

Y ahí arreó contra Juan Molinar Horcasitas (uno de los principales acusadores de la deuda del coahuilense junto con Gustavo Madero) de quien dijo “es incapaz de hablar de la deuda que dejó con la Guardería ABC y los 49 niños calcinados”.

En cuanto al presidente del PAN, se burló: “Si su tío abuelo viviera, lo sacaba de la familia”; mencionando de paso que la deuda más importante es la deuda social que tiene el Gobierno con la sociedad en materia de combate a la pobreza.

¿Y la falsificación de los decretos con los que se justificó la contratación de deuda, apá?

Ah, pues de ello se deslindó completitito Humberto Moreira alegando que él dejó la Administración en enero de este año y los decretos están fechados en marzo.

-¿Va a pedir licencia al cargo?, le lanzaron a bocajarro.

-Sí, claro. Voy a pedir mi licencia para conducir en la ciudad de México…-, reviró. Y ya en serio agregó: “¡Eso quisieran los del PAN! Yo vine aquí a ganar elecciones. Ya les gané cuatro: Estado de México, Hidalgo, Nayarit y Coahuila, a eso vine y ahora vengo a Michoacán”.

Y refutó por supuesto que Miguel Osorio Chong lo fuera a sustituir al frente del partido, como se ha filtrado en algunos ambientes (el ex gobernador de Hidalgo es muy amigo de Peña Nieto, era incluso su candidato original para ocupar la presidencia del PRI).

Y para evitar mayores especulaciones anunció que Osorio Chong ocuparía la secretaría de Acción Política en el partido. ¡Ni más, ni menos! (¿Se requiere algo más claro para apuntar que Peña Nieto será el candidato?)

Así, mientras el presidente nacional del PRI trataba de dar carpetazo a su posible dimisión y al asunto de la deuda en el estado que gobernó –indicó que no volvería a hablar del tema–, Manlio Fabio Beltrones y Enrique Peña Nieto aparecían juntos en otra conferencia de prensa en la misma capital michoacana.

A los dos aspirantes a la candidatura presidencial del tricolor les interrogaron a la vez:

- ¿Pase lo que pase, se mantendrán unidos hacia el 2012?

Peña Nieto fue el primero en responder: “Lo puedo afirmar y suscribir que así será”.

Manlio Fabio contestó a su vez: “El PRI no tendrá distracción alguna. Sabe muy bien lo que está buscando y es darle un nuevo rumbo al país, y en eso no se va a equivocar. Todos estaremos unidos en ese propósito”.

Conclusión de las morelianas: Ya se coció este arroz.

No hay comentarios: