“Pacté con Calderón a cambio de cargos“

Lo que negocié en 2006, señala Elba Esther Gordillo, fueron las direcciones del ISSSTE, del Sistema Nacional de Seguridad Pública y de la Lotería Nacional

La presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Elba Esther Gordillo, reveló ayer que pactó en 2006 con Felipe Calderón apoyar su candidatura presidencial a cambio de cargos en el gobierno federal. “Mea culpa, mea culpa... Vino la sucesión y llegamos al acuerdo de ir con el presidente Calderón por la Presidencia de la República, previos arreglos de orden político que no deben avergonzar a nadie, a mí no me avergüenzan, yo hago política”, dijo Gordillo. “Sí, sí hicimos un arreglo político que en términos educativos abarcó la evaluación de los maestros y el impulso de la calidad”, expresó. La entrega de cargos que ocuparon Roberto Campa, en el Sistema Nacional de Seguridad Pública; Francisco Yañez, en la Lotería Nacional, y Miguel Ángel Yunes en el ISSSTE, consideró que no los usó para satisfacer sus ambiciones personales, “sino para que aquellos que trabajaban en Nueva Alianza tuvieran un espacio político y pudieran seguirse desarrollando, y esto es legítimo”. En conferencia, a la que convocó para responder “todo lo que quieran”, Gordillo lanzó elogios y/o reproches a esos funcionarios, a quienes “fuimos colocando”, pero que ya no ocupan los referidos puestos. De Campa, “muy respetable, mi amigo”, mencionó que “por equis circunstancia, que no viene al momento (recordar), prefirió renunciar a sus actividades privadas y no continuar con el arreglo político que habíamos hecho; sobre Yañez, quien fuera su yerno, se refirió como “otro individuo” que participó en el equipo. Sin embargo, sobre el caso del ex titular del Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado se deslindó y hasta pidió que se audite: “acepto y reconozco que sí apoyé al licenciado Yunes y que sí impulsé (reformas a) la ley (sobre ese instituto), pero también exijo que se aclare que no tuve nada que ver en los asuntos del manejo del ISSSTE”. Lo anterior porque “estamos ante claras evidencias de malos manejos, de los cuales por razones éticas, morales, políticas, yo me deslindo totalmente y exigimos que haya una auditoría”, insistió. Gordillo Morales, quien estuvo acompañada del comité directivo del SNTE, rechazó tener simpatía hacia algún precandidato presidencial: “yo me llevo muy bien con el propio secretario Lujambio, me llevo bien con el Secretario Cordero, tenemos una relación de respeto mutuo, de relación respetuosa como la tenemos con el jefe de Gobierno, como la tenemos con todos los gobernadores, entre los que está el licenciado Peña”. Y enseguida acotó: “Pero no hemos tomado una decisión de con quién” porque no es el momento. La maestra previamente consideró que de todos los precandidatos no se hace uno y que ella “metería en una licuadora a todos a ver qué sale”, porque, agregó, cada uno tiene virtudes y defectos: “de la licuadora no rescatas nada, la verdad, en una licuadora licúas, haces una mezcla”. Mencionó que no ha escuchado planteamientos serios de ningún precandidato y que “todos andamos en una confusión adelantando tiempos y cuando los tiempos se adelantan ocasionan abortos”. En los 135 minutos que duró la conferencia, Gordillo afirmó que al gremio le “encantaría que hubiera un secretario dedicado ex profeso al tema educativo”, y también lanzó críticas contra la panista Josefina Vázquez Mota y el perredista Andrés Manuel López Obrador. A la primera la descalificó porque, acusó, desde que llegó al cargo estuvo pensando en ser candidata a la Presidencia y todos los logros que tuvo los manejó con el ‘yo puedo dominar este sindicato’, pero, agregó, este sindicato no necesita domadores desde la SEP. De AMLO sostuvo que siempre “ha trabajado” con una corriente del gremio radical y antagónica a la suya que es la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación. “Él ya me tomó como alguien a quien hay que descalificar y no me voy a meter a su pleito”. La dirigente aprovechó también para defender a su hija, Mónica Arriola, quien busca convertirse en líder del Partido Nueva Alianza, ligado al SNTE, pues, dijo: “lo que no se vale, es antiético, es que no se califique si sus méritos son propios o es junior; “si por ser mi hija la descalifican, perdónenme, muérdanse un poquito la lengua”.